lunes, 3 de febrero de 2020

Un poquito de su piel

Es que
el epicentro de ella
es él.

Entonces,
no hay vendaval
ni migración
ni ridículo argumento
que quiera escuchar.

Solo desea su pulso,
su latido
y tal vez,
hasta se anime
y le pida
-de a ratos-

un poquito de su piel.


Nada más.





María Inés Iacometti

No hay comentarios.:

Publicar un comentario