miércoles, 30 de septiembre de 2020

El miedo

Supuse la ternura solo con mirarte
y las calles se deslizaron debajo de nosotros
como pidiendo prestadas las sombras al sol.

Las agujas del​ día
se sintieron urgidas por un poco de descanso
y recostaron sus esmeros en la arena
para no anunciarse,
para no apurarnos.

Hubo brisa.
O tal vez, solo suspiros abrazándose,
fundiéndose en estelas sedosas
de miel y libertad.

No interrumpimos nada pero detuvimos todo.

Incluso...
 

            El miedo.

María Inés Iacometti
 

2 comentarios:

  1. Efectivamente el miedo paralizante. El castrante. El inhibidor de sueños...de ilusiones, y con ello hasta de emprendimientos. Y el miedo pretexto para continuar en el más terrible de los anquilosamientos.
    Nuestra poeta, por vía de contraste apela al coraje, a la llegada de los tiempos atrevidos, jubilosos.

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    1. Poner sobre la mesa las cosas y emociones que molestan, sirven a la sanación. Gracias por tan bien leerme querido José.

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