jueves, 23 de julio de 2020

Tirano de sueños



No me mires así, desde lo etéreo
de un naufragio inútil, de un rumor de besos;
de la lejanía de este ocaso inmenso.

Ya no me supliques en profundos sueños,
que al oír mi nombre -de tus labios preso-
pueden desplomarse mis afanes rectos...

Posa en mí tus manos. Fúndete en mi pecho.
No pronuncies tantas frases de silencio
que el amor se extingue, nos obliga al fuego.

Bésame en la frente. Graba en mí tu sello.
Temo despertarme... ¡quiebra ya mi velo!
que el tiempo es tirano, y se acaba el sueño.

María Inés Iacometti

3 comentarios:

  1. Qué no quede ningún regocijo sin completar. Que no hay espasmos que no le sean connaturales a este barro. Quizás no abarque todo lo que nuestra bella poetisa nos quiere informar pero entre muchas yo me atrevo a decir esas. Y que en el cauce de nuestra piel puede como fresco manantial correr la Vida, es decir: lo eterno.
    Gracias.

    José R. Hernández V.

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    1. Convocás a la eternidad y todo es posible. Gracias José, por abarcarme con tus palabras. Es majestuoso tu vuelo.
      Un gran abrazo de alas sorprendidas.

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